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Ricardo Sánchez-Serra*
Según anunció la Cancillería peruana, el genocida rey de Marruecos, Mohamed VI, vendrá al Perú para asistir a la III Cumbre América del Sur-Países Árabes, el 1 y 2 de octubre. ¿Por qué lo calificamos de genocida?
Según el diccionario de la Real Academia Española (RAE) genocidio es: “Exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivo de raza, de etnia, de religión, de política o de nacionalidad”. El exterminio, la matanza y la tortura es el ucase de ese rey feudal contra el indefenso pueblo saharaui en el Sáhara Occidental invadido por Marruecos.
Numerosas organizaciones internacionales defensoras de los derechos humanos han condenado a Marruecos por sus constantes violaciones. El Tribunal Internacional sobre la Infancia afectada por la Guerra y la Pobreza - Tribunal Internacional contra los Crímenes de Lesa Humanidad y el Genocidio, comunicó “la Condena Internacional contra el Gobierno de Marruecos y su ejército de ocupación responsable de los Crímenes de Lesa y el Genocidio sobre la población Saharaui donde se denuncia los crímenes aberrantes y el avance sistemático del genocidio contra la población saharaui en los campamentos de refugiados con sus bloqueos, y ahora en especial contra el campamento de protesta Gdaim Izic contra niños y niñas, mujeres y ancianos del Sahara Occidental, por parte del ejército de ocupación marroquí, donde ha violado todas las Convenciones Humanitarias de Ginebra, todos las declaraciones Internacionales de Derechos Humanos, y ha puesto como método de guerra el ataque sobre la población civil”.
El Fiscal Internacional de Derechos Humanos, Sergio Tapia, señaló que “Marruecos y su Rey Mohamed VI sólo conocen el lenguaje del terrorismo de estado, el odio y la violación sistemática de los Derechos Humanos donde ordenan a su policía real la entrada en las casas y se llevarse a todos los varones saharauis de más de 12 años. “Si no podemos combatir los Crímenes contra la Humanidad, al menos denunciémoslos para que no se cometan en silencio”, es la Sentencia Moral y Ética en memoria de los saharauis que mueren cada día en el Sáhara Occidental ocupado por Marruecos, al menos para devolverles la dignidad que le han robado con estos crímenes de la barbarie humana”.
Asimismo, se pueden apreciar los informes de Human Right Watch, Amnesty Internacional y últimamente del Centro Robert F. Kennedy para la Justicia y los Derechos Humanos, que condenan a Marruecos por su constante violación a los derechos humanos. Asimismo, el Parlamento Europeo pide aclarar hechos, muertes y desapariciones y lamenta ataques a la libertad de prensa. ¿Decimos algo que no está ajustado a la verdad? Vean los informes en sus páginas web.
La balanza comercial entre Perú y Marruecos es de 21 millones de dólares y la inversión marroquí en nuestro país es nula.
¿Viene el rey?
¿Para qué viene el rey entonces? No hay casi relaciones, ni intercambio, ni inversiones (y todavía presionan por un Tratado de Libre Comercio). Se ha dado el caso que ha anunciado su llegada a diversas cumbres y nunca llegó. A la cumbre de la Liga Árabe en Bagdad para ver el crucial tema de Siria, ni se apareció.
¿Vendrá al Perú, o es un “bluff” para que la Cancillería peruana esté contenta y lo anuncie? ¿Viajará unos 9.000 kilómetros para estar horas en Nueva York –para la Asamblea General de la ONU- un día en Lima y al día siguiente (3 de octubre) recibir al presidente español, Mariano Rajoy, en Rabat para la Reunión de Alto Nivel España-Marruecos? Dudamos que haga esperar a Rajoy. Es más que seguro que cancele su viaje a Lima y desaire al ASPA.
Solo para presionar
Y si viene, sería solo para “tratar” de presionar para que el Perú no reanude las relaciones con la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y que también para ello cuenta con muchos “súbditos” peruanos, gracias a prebendas, viajes y condecoraciones. Lamentable compra de conciencias. Asimismo, su país se presenta “como la puerta al mundo árabe”, gran ingenuidad para los que le crean. Cada país es diferente, con intereses disímiles. Ahora engatusan con que “España se molesta, que Francia se molesta” si nos acercamos a las RASD… y todavía hay gente que les cree.
Defensa de principios
Las relaciones de Marruecos con el Perú son insignificantes, aunque para ellos sería una piedra en el zapato que nuestro país reanude las relaciones con la RASD, como debiera ser. Muchas naciones tienen relaciones con los dos Estados y con las dos embajadas en sus capitales. Lo injusto y antiético sería tenerla con uno y no tenerlo con el otro. El Perú ganaría mucho, no en dinero, no en comercio hoy, con la RASD; sí ganaría mucho en prestigio internacional con decisiones valientes, justas y éticas, defendiendo principios y valores, el Derecho Internacional, la defensa de la autodeterminación de los pueblos y los derechos humanos.
Como se ve aquí no hay intereses ideológicos, alineamientos, ni nada. Sólo el apoyo a un pueblo sojuzgado e invadido como el saharaui, cuyo territorio será el último en descolonizarse y que merece la independencia. La Corte Internacional de Justicia de La Haya lo reafirma en su histórica sentencia: “La conclusión del Tribunal es que los materiales e información presentados a él no establecen ningún vínculo de soberanía territorial entre el territorio del Sáhara Occidental y el reino de Marruecos o la entidad mauritana”.
Agrega “por tanto, el Tribunal concluye que no ha encontrado vínculos jurídicos de tal naturaleza que puedan afectar a la aplicación de la Resolución 1514 (XV) de la Asamblea General a la descolonización del Sáhara Occidental y, en particular, al principio de autodeterminación a través de la libre y genuina expresión de la voluntad del pueblo del territorio”. (16 de octubre de 1975).
Confiamos en que los funcionarios peruanos no rindan pleitesía –si es que viene- a un soberano que ordena masacrar y atenta permanentemente contra los derechos humanos del pueblo saharaui. Con cortesía sí, pero sin reverencia huachafa. Como dice un proverbio anónimo: "A Dios de rodillas, al rey de pie y al demonio en el canapé".
Y si se trata el tema de la RASD, confiamos en que el Perú no se dejará presionar y prime nuestra decisión soberana y la defensa de los principios.
* Periodista. Miembro de la Prensa Extranjera. Analista internacional.